construcción
de altura
escalones
Aspectos históricos
En el casco antiguo de la ciudad, donde un tiempo se encontraba el antiguo foro romano, Piazza Erbe, surge la Torre Lamberti.
Actualmente con sus 84 metros de altura y con sus numerosos cambios arquitectónicos durante sus ochocientos años de historia, es el edificio más alto de Verona.
La construcción se inició en el año 1172 por deseo de la noble y misteriosa familia Lamberti, de la que no se ha vuelto a tener noticias. Se eligió el estilo románico, típico de la época, con ladrillos alternados a la toba, y que todavía se pueden ver en la parte baja de la construcción.
La Torre, que a su tiempo medía sólo 37 metros, fue integrada en el Palacio del Consejo, edificado tras la institución del Libero Comune. Se añadieron, en el año 1295, dos campanas -la campana Rengo y la campana Marangona- y a partir de aquí se la denominó “Torre de las Campanas”.
En 1403 un rayo destruyó la cúspide, pero sólo en el año 1448 comenzaron las largas obras de restauración y elevamiento que se concluyeron dieciséis años más tarde con la construcción del campanario octogonal de ladrillos y mármol blanco.
La Torre alcanzó, de esta manera, los actuales 84 metros de altura; sin embargo no tenía aún el aspecto con el que hoy la conocemos.
Sólo en 1779 se añadió el reloj, colocado en sustitución del de la cercana Torre del Gardello que había dejado de funcionar.
Desde 1972, la torre ha estado abierta al público y puede subir hasta el primer nivel panorámico para admirar una vista incomparable de la ciudad y sus alrededores.